El oráculo y el narrador omnisciente
No era necesario ser el oráculo de la paradoja de Newcomb para prever que la entrega de la semana pasada iba a suscitar numerosos comentarios. Como ya señalaron en su día tanto Robert Nozick como Martin Gardner, la idea misma de que pueda existir un ser capaz de predecir el futuro tiene unas implicaciones filosóficas trascendentales, con respecto a las cuales, según parece, la gente adopta posturas enfrentadas e irreconciliables: los que tienen clarísimo que hay que coger las dos cajas creen que los que solo cogerían la caja cerrada desbarran, y viceversa. Y es que, como quien no quiere la cosa, el problema de las dos cajas remite a la vieja, viejísima cuestión del libre albedrío: si alguien sabe con certeza lo que voy a hacer, no puedo hacer otra cosa: o el oráculo puede equivocarse, o mi capacidad de elección es ilusoria.
Fuente: El País