Guardiola se impone a Emery en la lucha por los puestos de Champions
Jérémy Doku enseñó el balón, Disasi le metió el gancho, y el balón desapareció. Se fue pegado al pie derecho de Doku, que corría inalcanzable por la banda, en busca de un compañero al que asistir. Su centro, un punterazo, pasó demasiado lejos de Emiliano Martínez y Matheus Nunes lo remató fuerte al segundo palo. Pocas veces se vio a Guardiola más excitado. Gritó el gol doblándose sobre sí mismo, como si descargase una presión insoportable. Después de siete meses de calamidades y decisiones antinaturales, después de una temporada de regresión y pérdida de identidad, su equipo, el Manchester City, volvía a dar muestras de recuperación. Con grandeza, presionando fuerte, al ataque, sin especular, apretó a un Aston Villa que parecía incontrolable hasta que pasó por el Etihad y se dejó un jirón y buena parte de las cartas para disputar la próxima Champions.
Fuente: El País